Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu: “El Futuro de lo que debe ser España nos atañe a todos y a todos corresponde decidir sobre él”

El senador del PP por Melilla, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu, ha hecho hoy una valoración sobre el estado de la situación del proceso de investidura del Presidente Sánchez, la opacidad con la que se están alcanzando acuerdos con partidos poco interesados en el interés general de los españoles y la posición del Partido Popular al respecto.

Ayer tuvo lugar en el Senado la reunión extraordinaria de la Comisión General de Comunidades Autónomas, específica del Senado, como cámara de representación territorial. “No existe una Comisión equivalente en el Congreso de los Diputados. La comisión cuenta con 60 senadores, de los cuales, en esta legislatura, 30 corresponden al Grupo Parlamentario Popular”.

En referencia a la situación del proceso de investidura de Pedro Sánchez, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu cuestionó la falta de transparencia en los acuerdos con partidos independentistas y la respuesta del Gobierno a la solicitud de explicaciones.

Asimismo, criticó la “ausencia de miembros del Gobierno y de los presidentes autonómicos afines al Partido Socialista en la Comisión General de Comunidades Autónomas”, donde se discutió la presunta colaboración del Presidente Sánchez con los partidos independentistas del País Vasco y Cataluña. “Esta falta de comparecencia evidencia la falta de respeto hacia el poder legislativo”.

“Ningún miembro del gobierno en funciones de la nación tuvo a bien comparecer para explicar ni para escuchar nada, poniendo de manifiesto la evidente falta de respeto al poder legislativo y al principal partido de la oposición por parte del actual gobierno en funciones, que ha venido consolidando este desprecio desde el mismo comienzo de su actuación a cargo del poder ejecutivo en junio de 2018. Tampoco compareció ninguno de los tres Presidentes Autonómicos con los que cuenta el PSOE (Asturias, Castilla-La Mancha y Navarra) ni el del País Vasco, del PNV”, reprochó.

“Todas sus intervenciones giraron en torno a los mismos tres asuntos: igualdad ante la ley de todos los españoles, autodeterminación, ruptura de la unidad de España y deuda autonómica”, precisó Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu, además de hacer hincapié en la importancia de “mantener la unidad de España y la igualdad de todos los españoles ante la ley”.

Como ha explicado, “el orden de intervención fue el de antigüedad de los respectivos Estatutos, correspondiendo el primer turno al presidente Aragonès, de Cataluña, que expuso tres criterios básicos. Que existe un conflicto entre Cataluña y España que se ha de resolver políticamente, que la amnistía de todos los inculpados en el denominado procès es el punto de partida para llegar a un referéndum de autodeterminación en el que los catalanes determinen su futuro y que el problema más importante era la falta de escucha a los catalanes por parte de los españoles. Seguidamente, abandonó el hemiciclo sin escuchar al resto de los comparecientes ni participantes.

El senador, también subrayó la “preocupación del Partido Popular respecto a la posibilidad de una amnistía para los inculpados en el proceso independentista”, lo que considera un perdón a los infractores en lugar de un perdón del Estado.

Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu, hace un llamamiento a la reflexión al Partido Socialista, pidiendo que se reconozca el resultado electoral y se evite someter a los españoles a pactos indignos con el único objetivo de mantener a Pedro Sánchez en el poder.

Ha aprovechado su comparecencia de prensa para abordar temas cruciales relacionados con la situación política en España y la colaboración del Presidente Sánchez con los partidos independentistas, destacando la necesidad de transparencia y respeto al poder legislativo.

En cuanto a la igualdad de los españoles ante la ley, se puso de manifiesto que una eventual amnistía a los inculpados por el procès, a diferencia de los indultos, que suponen un perdón del estado a los infractores, significaría, precisamente lo contrario, un perdón de los infractores al estado por actuaciones que el estado, supuestamente, nunca debió acometer.

Al parecer, el Partido Socialista se encuentra trabajando arduamente, para no calificar dicha actuación como una Ley de Amnistía utilizando para ello todo el artificio semántico del que sean capaces en el preámbulo de dicha ley justificando la misma sobre la base de la necesidad de encontrar motivos para la reconciliación y la convivencia, sin asumir que resulta obvio para la inmensa mayoría de los españoles que se trata de decretar la impunidad para los actos delictivos de un sector reducido de españoles, que son los independentistas, que no han mostrado arrepentimiento alguno, que no renuncian a sus fines ni a la unilateralidad de sus decisiones y que el único motivo real para acometer este proceso no tiene nada que ver con la convivencia, que no queda, en absoluto garantizada, sino con la necesidad de contar con los 7 votos de Junts (los demás se dan por descontados) para la investidura de Sánchez, lo cual, obviamente, no se puede plantear con tanto descaro en el preámbulo con el que quieren hacer digerible la ley a los españoles que quieran someterse a esa digestión.

En cuanto a la autodeterminación, los presidentes enfatizaron el contenido del artículo 2 de la Constitución “La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la nación española, patria común e indivisible de todos los españoles y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas”.
Por último, en cuanto a la deuda autonómica y a un eventual pacto fiscal de condonación de la misma para Cataluña, la Comunidad con mayor deuda con el estado por importe de 72 mil millones de euros, manifestaron que cualquier concesión en temas de financiación que hiciera Sánchez ante el independentismo supondría un agravio comparativo con los españoles que viven en el resto de las regiones españolas, especialmente con los que viven en Murcia, Valencia, Andalucía y Castilla La Mancha que son las CCAA que realmente están infra financiadas.

Tras los presidentes, intervinieron los senadores por designación autonómica, que redundaron sobre los principios anteriormente enunciados. Por último, intervinieron los portavoces de los Grupos, siendo los dos últimos de ellos los del Partido Socialista, señor Espadas y Partido Popular, señor Silván.

Dada la afirmación del portavoz socialista, que afirmó que “todo lo enunciado durante el día no era más que un colosal esfuerzo del PP por ahondar en la confrontación y en el enfrentamiento en la sociedad española”, que reclamaba concordia y convivencia, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu destacó el “llamamiento a la reflexión del portavoz del PP al Partido Socialista”, para que reconociera el resultado electoral y eludiesen someter a todos los españoles a una serie de pactos indignos que no tienen como objeto la mejora del bienestar general de los españoles, sino simplemente, dar satisfacción a las necesidades del presidente Sánchez para mantenerse, a cualquier, precio en la Moncloa.

El senador del PP por Melilla ha compartido una serie de reflexiones. En primer lugar, “no cree en la existencia de un conflicto de Cataluña con España, ni del País Vasco con España, sino en la existencia de un conflicto de un determinado número de españoles, que se auto-califican como independentistas, con su propia identidad, que no es otra que la española, por la que ellos y todos nosotros somos reconocidos e identificados por el resto del mundo conocido”.

En este sentido, tiene claro que “España es un maravilloso proyecto colectivo al que nos hemos venido incorporando desde la antigüedad todos los pueblos y diferentes organizaciones administrativas y políticas que en el territorio que hoy la define hemos vivido”. “Retroceder a estadios anteriores a esa incorporación no es otra cosa más que caminar en contra de la historia”, ha considerado.

“Decía Fernando García de Cortázar que en España, el presente es inestable y el futuro incierto, pero el pasado es impredecible”, queriendo referirse a los relatos históricos que acarician los independentistas, alejados de la ortodoxia histórica, pero satisfactorio para sus fines políticos actuales”, comentó.

En segundo lugar, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu ha dejado claro que “no existe más soberanía en nuestro ordenamiento constitucional que la ejercida por el conjunto del pueblo español”. El art. 1.2 de la Constitución establece que “la soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado”. “Esta soberanía no se fracciona por lo que no cabe hablar de la soberanía catalana, ni la vasca, ni la gallega, ni la murciana, ni de ninguna otra. Es por ello que no cabe definir criterios de autodeterminación soberana por parte de ninguna nacionalidad ni región. El futuro de lo que haya de ser nuestra nación en su conjunto y de sus partes, nos atañe a todos y a todos corresponde decidir sobre él”, subrayó.

No ha dejado pasar por alto, que “en una Ciudad Autónoma en cuyo Estatuto se enfatiza por dos veces en su preámbulo y en su artículo 1 el concepto constitucional de solidaridad establecido en el art. 2 de la Constitución antes citado, sobra hablar de los pactos fiscales dirigidos a beneficiar a unos pocos para obtener sus votos en perjuicio de la inmensa mayoría de los españoles”. “Sorprende ver a los socialistas, presuntamente tan comprometidos con la solidaridad, embarcados en este proceso de egoísmo regional injusto”, sentenció.

Por último, en relación a los presuntos esfuerzos de confrontación de los que el Partido Socialista acusa al Partido Popular, insiste en hacer un llamamiento a la reflexión y recuperar el talante de diálogo entre diferentes que ha definido nuestro recorrido democrático, hasta la llegada del Presidente Zapatero al gobierno que rompió todos los lazos de posible entendimiento, que no han venido sino deteriorándose desde su toma de posesión, como presidente del gobierno en 2004, hasta nuestros días”.“Sería bueno que reflexionasen sobre todas sus negativas a escuchar las propuestas de diálogo del Partido Popular en beneficio de la gobernabilidad y el interés general de los españoles”, ha concluido.